Pastor Carnival, en primer lugar, nuestras felicitaciones por su nuevo cargo y nos sumaremos a las oraciones que pidió para usted y para el equipo que lo acompañará, cuando comunicó el resultado de la votación en su cuenta IG. Pastor, primeramente una pregunta que puede ayudar a muchos siervos              atribulados por el cúmulo de obligaciones: ¿cuál es el «secreto» para poder llevar adelante Catedral de la Fe y ahora la actividad que suma, al tener que presidir la UAD, más otras actividades institucionales que tiene?
Bueno, antes que nada gracias por esta entrevista que me están realizando. Espero que sea de bendición a cada hermano que lea esta nota.
Cuando me preguntás cual es el secreto, se me vienen tres cosas a la mente. La primera está ligada a la importancia de administrar lo primero que Dios nos dio. La parábola de los talentos refleja esta idea: si Dios te dio algo no importa cuán pequeño sea, uno lo debe administrar bien, y si Dios te está dando cosas nuevas a lo que tenías antes, tenés que seguir administrándolo bien. Hay muchos hermanos que cuando reciben algo nuevo descuidan lo anterior que Dios les dio, se centran tanto en lo nuevo que se olvidan que recibieron lo nuevo en base a lo «viejo» que tenían.  Básicamente es ser fiel completamente a lo que Dios pone en nuestras manos.
En segundo lugar, formar personas alrededor de uno que lo ayuden a administrar mejor las cosas que Dios le dio a uno. No sé si recordarás que en un libro de liderazgo se hablaba del pastor orquesta y decía que era aquel que hacía todo solo. La pregunta principal es ¿por qué lo hacía solo? Porque no formaba gente. Jesús mismo formó personas para que sigan con la tarea, les enseñó y los comisionó. Nosotros, los pastores, debemos hacer lo mismo: debemos formar y comisionar a personas idóneas para que sigan con la tarea y ayuden en la obra. El apóstol Pablo entendía este principio y lo formó a Tito, y luego lo envía a Tito a Creta a formar       ancianos. La obra se sostiene cuando uno forma personas.
En tercer lugar, considero que se debe tener una visión clara sobre lo que se desea hacer. En el arte se dice que el artista al mirar un lienzo o un mármol, ya vio el resultado de cómo va a quedar esa obra maestra pero lo único que falta es ejecutar la labor para realizarla. Lo mismo pasa en otros ámbitos de la vida, tener la visión te permite trabajar adecuadamente y mantener el enfoque sin estar distrayéndose con otras cosas. Si tenés una visión para la iglesia, trabajás en pos de eso, si tenés una visión para la denominación trabajás en pos de eso. Una visión clara.

Pastor, una pregunta en dos partes: a) qué significa la UAD para la Iglesia evangélica argentina y b) que significa la UAD en lo personal para usted, a la que está cercano desde su adolescencia, prácticamente
Como muchos saben la UAD es una de las denominaciones más grandes de la Argentina. Considero que la institución de por sí representa a un gran sector de los evangélicos pero sobre todo representa el espíritu pionero de la evangelización, la formación de pastores, la plantación de iglesias y las misiones. La UAD ha llegado al lugar que está por mantener esa visión de trabajo. Mientras que sigamos por ese camino seguiremos creciendo. Mientras que cumplamos la Gran Comisión seguiremos creciendo.
En cuanto para mí la UAD significa el lugar donde me formé. Es muy interesante recordar hacia atrás cuando comencé el seminario siendo muy joven y como, mi pastor José Manuel Carlos y el misionero Rafael Hyatt, nos incentivaron a creerle a Dios respondiendo al llamado de servir. Si tengo que pensar qué fue una de las cosas que más me marcó, es que me enseñaron a vivir ese espíritu pionero del que hablábamos antes: salíamos a evangelizar todas las semanas, me incentivaron a formarme como pastor en el IBRP y me ayudaron a plantar la iglesia que hoy pastoreo. Ese es el espíritu que deseo que esté permanentemente en toda la UAD.

Pastor, la UAD como entidad que nuclea a tantas iglesias tiene muchas actividades, entre las que resulta difícil establecer un ránking de importancia (Nota para el lector: la UAD tiene 19 Departamentos Nacionales). Pese a esto, ¿dónde cree usted que hay que poner más énfasis o mayores esfuerzos, considerando dos realidades: la nuestra, la evangélica, y la que vive el país como Nación?
Tu pregunta es un poco compleja porque hay muchos factores que atraviesan a ambas realidades pero creo que hay un hilo conductor que me ayudará a responder.
Dentro de la realidad evangélica necesitamos poner más énfasis en cumplir con la Gran Comisión, ese es el fin del cuerpo de Cristo, porque si no lo hacemos estamos fallando a lo grande. Es así que cada Iglesia de la UAD debe estar enfocada en esa tarea. Por ejemplo, uno de los métodos más importantes de evangelismo es la plantación de iglesias, el cual vengo acompañando desde mi gestión previa como vicepresidente, porque más iglesias significan más personas convertidas, más espacios para desarrollar los distintos departamentos que seguirán evangelizando, más oportunidades para formas ministros para plantar más iglesias, más oportunidades para tener más misioneros. Es un ciclo virtuoso: si hay más iglesias hay más de todo lo demás, —volviendo a lo vital que es cumplir la Gran Comisión.
En cuanto a la realidad nacional, sabemos que la situación actual es compleja. Esta transicionando una pandemia que viene dejando secuelas en lo económico y en lo psicológico, ya que muchas personas han perdido seres queridos, aún la iglesia ha sufrido la pérdida de pastores, líderes y hermanos en general. Creo que la realidad nacional necesita que Jesús intervenga y la única forma de que eso acontezca es a través de que su iglesia cumpla la Gran Comisión. Solo Jesús puede transformar nuestra Argentina. Es por eso que todo nuestro esfuerzo debe estar puesto en cumplir la Gran Comisión.

Pastor, en el Nº de Enero 2022 de Rhema, usted comentaba que la iglesia no debía perder, bajo ningún concepto, lo ganado en el campo de la comunicación digital. Dos cuestiones: a) ¿cómo está la UAD, como entidad rectora, al respecto? Y b) ¿cuál es su consejo para la pastoral, para que se logre el balance correcto, donde la comodidad de estar en el culto, plácidamente sentado en casa, no vaya en desmedro de todo lo que significa la presencia viva en la reunión?
Bueno, cuando me consultás sobre cómo está la UAD como entidad rectora en cuanto al campo de la comunicación digital es difícil responder. ¿Por qué es difícil? Porque como institución solemos utilizar los canales clásicos para comunicarnos con nuestros miembros. Si tengo que pensar en las innovaciones que se implementaron en los últimos tres años: hemos implementado el Zoom para reuniones nacionales y provinciales con pastores; hemos abierto nuevas vías de comunicación como Whatsapp y aún realizado un evento en línea símil a una convención con talleres en línea. Si miro los departamentos UAD, ellos han implementado capacitaciones en línea, convenciones, etc. Y creo que todas esas herramientas de comunicación digital vinieron para acompañar el crecimiento de la iglesia en su tarea evangelizadora y de formación.
Mi consejo para la pastoral es entender que acabamos de vivir un gran cambio en la vida de la iglesia y que hoy tenemos cuatro tipos de miembros en la congregación a los cuales debemos acompañar. El primer tipo son aquellos que se convirtieron en la pandemia y que no pisaron nuestro templo hasta que se volvió a lo presencial; el segundo tipo son los que se convirtieron a la distancia y se sienten parte de nuestras congregaciones y no pueden asistir por la lejanía —entonces participan digitalmente; el tercer tipo son los que venían previamente y se acostumbraron a lo online dejando de asistir al templo; y el cuarto tipo son los que asistían antes de la pandemia y volvieron a asistir cuando se abrió todo. Frente a este panorama hay que doblar los esfuerzos y mantener ambas modalidades, digital y presencial, dentro de nuestras congregaciones. Entiendo que algunos digan que no es lo mismo la reunión presencial y la digital pero recordemos que el que hace la obra es el Espíritu Santo y nosotros somos herramientas en sus manos. Así que no se preocupen porque como la obra es de Dios, Él mismo se va a encargar de ayudarnos a encontrar el punto de equilibrio en esta época de cambios.

Pastor Carnival, un tema controversial: Iglesia y política, Iglesia y la seducción sobre la misma de los políticos, siempre interesados sobre el apetecible voto evangélico. ¿Cuál es su mirada sobre este tema específico y cuál será su impronta para la UAD al respecto?
Sobre este asunto tengo dos opiniones muy marcadas. La primera, es que si un pastor es una persona que tiene ideas políticas o simpatiza con algún partido político, esos pensamientos deben quedar en el ámbito de lo privado porque cuando decidió convertirse en pastor lo importante y únicamente relevante es Cristo y su misión.  Es decir, su forma de pensar la política no debe de condicionar a otros a que reciban la salvación eterna porque somos representantes de Dios aquí en la tierra. Ahora, si el pastor desea involucrarse en la política compitiendo por un cargo público o militando dentro de un partido, lo ideal es que se aparte de sus funciones pastorales y que realice esa tarea. De esta manera evitamos que las personas se confundan sobre la iglesia y la política.
Lo segundo, es que muchas de nuestras congregaciones son deseables en épocas de campaña y considero que debemos cuidar la plataforma de la iglesia por la llegada que tiene a los miembros de las congregaciones. La plataforma no debe transformarse en una plataforma política. La plataforma es para la edificación de la iglesia y no para hacer propaganda política. Simplemente seamos sabios en no exponer a nuestra congregación a tendencias políticas. Jesús es para todos y la iglesia también lo es.

Pastor, las páginas de Rhema están a su disposición para su mensaje a los lectores, tanto integrantes de la UAD, como los fieles que pertenecen a otras instituciones.
La palabra con la que Dios me está hablando es “Cualquiera que bebiere de esta agua, volverá a tener sed; mas el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás…”  —Juan 4: 13-14.
Si estás sediento, la promesa de Dios es saciar a todos los sedientos. Un deseo por más de Dios, Él siempre tiene más para nuestras vidas.

Pastor, una última, personal: ¡¿cómo va con el abuelazgo con Luca?! (¡que se nos hace difícil verlo como abuelo, pero a todos les llega!) (risas).

Con Alejandra estamos felices de ingresar en esta nueva etapa de la vida; disfrutamos mucho la llegada de Luca, es una bendición. La Biblia dice que los nietos son coronas para los abuelos, ellos son una extensión de nuestras vidas en el tiempo. ¡Esperamos por más nietos!
Pastor, muchas gracias por su tiempo, por sus respuestas y una vez más reciba nuestro apoyo en oración. ¡Dios lo bendiga y le ilumine el camino en esta nueva etapa de liderazgo institucional de la UAD!—